29 de julio de 2011

Dedicatoria: Mi mejor amigo


No hay nada más rico que ser el mejor amigo de uno: se coinciden las agendas, los términos y la empatia es total. Es maravilloso, de verdad que si; no es como algunos dicen que esa es la excusa de los inadaptados o el pretexto de los narcisos.
Afirmo que es maravilloso porque te da la sensación de completitud, hace de la soledad algo que no "tienes que aguantar", cuando eres tu mejor amigo, cuando no necesitas de segundos o terceros para ser feliz o simplemente para pasar un buen rato entonces ya no tienes necesidad de soportar charlas, reuniones y gente insoportables (realmente vale la redundancia) sólo para encajar. Puedes disfrutar del mundo sin otro limite que el que te impogas tú. Además, en la soledad, es donde nos encontramos realmente con nosotros, es el momento perfecto para saber quién somos, qué queremos y qué tenemos para ofrecerle a los demás.

Sé tu amigo inseparable, sé tu confidente, sé tu complemento. Haz las paces con tu soledad, vive cada momento como lo que es: irrepetible y mágico y verás que cuando tengas la oportunidad de compartir con alguien va a a ser sólo por decisión propia y no por temor a estar solo.

Alguien dijo alguna vez que la soledad es un suplicio ingenioso de la naturaleza, que hace que nos encontremos con nosotros mismos, para poder valorar a los demás; estoy de acuerdo, cuando nadie está y se cierran las puertas y estás sólo tú presente pueden suceder dos cosas: es un tormento o es una delicia. Estamos preparados para estar en soledad? Si no lo soportamos, cómo esperamos estar con alguien más? Qué esperamos ofrecer?

Dedicado a una personita que necesita darse cuenta que es lo suficientementemente maravillosa como para merecerse su propia amistad y que me enseñó sin saberlo que soy la mejor amiga que yo podría tener

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